El lenguaje médico es uno de los más ricos y productivos gracias a la influencia de las lenguas clásicas y, en la actualidad, gracias a los neologismos y los calcos del inglés, aunque estos últimos nos den algún que otro dolor de cabeza (¿bypass o derivación? Hagan sus apuestas). Sin embargo, a la hora de hablar de medicina tenemos muchas más herramientas a nuestra disposición que los clásicos tecnicismos. Una de ellas es el uso metafórico del lenguaje.
Según el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, una metáfora es «una traslación del sentido recto de una voz a otro figurado, en virtud de una comparación tácita». En el lenguaje médico, estas comparaciones están a veces tan asentadas en su uso, que separarlas de su referente físico (el signo clínico) puede ser difícil.
Hoy os presento tres usos metafóricos relacionados con el mundo animal para describir signos de dos de mis especialidades favoritas: reumatología y cardiología.
Alas de mariposa (butterfly-shaped rash):

Le debemos al Doctor Gregory House la concienciación del público general acerca del lupus eritematoso sistémico (LES) a pesar de que, en las ocho temporadas de la serie, el irascible pero brillante doctor solo tuvo un paciente con LES que, además, no encajaba con el perfil típico de paciente que sufre esta enfermedad (mujer, caucásica, mediana edad).
Aunque el LES aparecía como un posible diagnóstico en casi cada episodio hasta el punto de convertirse en un cliché, la serie no trató apenas una de las metáforas animales más bonitas a la hora de describir uno de los signos clínicos típicos de esta enfermedad: alas de mariposa. Esta frase hace referencia a la lesión cutánea facial con forma de alas de mariposa (eritema malar) cuya forma evoca a una mariposa posada sobre la nariz con las alas extendidas sobre las mejillas.
Además, no podemos dejar de hablar del lupus sin tratar el propio nombre de la enfermedad (lobo), cuya evolución en la historia de la medicina ha pasado de significar «enfermedad erosiva de la piel» (latín medieval), cáncer (en sus formas «lupo» y «lobo» en el español del siglo XV) y, finalmente, lupus como lupus eritematoso, que aparece en francés (lupus érythémateux) en 1850.
Orejas de conejo (ECG) (bunny/rabbit ears pattern):

Hay pocas cosas más inocentes y adorables que las orejas de un conejo, especialmente para quienes crecimos viendo las aventuras de Tambor y Bambi. Sin embargo, la aparición de un conejo en medicina tiene un significado potencialmente mucho más peligroso.
El «patrón en M» o «en orejas de conejo» hace referencia a un patrón en la documentación electrocardiográfica indicativo de bloqueo de rama derecha (QRS ancho, un patrón en V1 rSR’, y en V6 qRS).
El bloqueo de rama derecha es una alteración del sistema de conducción del corazón que hace que uno de los ventrículos se contraiga una fracción de segundo antes que el otro. Este bloqueo no es tan peligroso como el bloqueo de rama izquierda, especialmente si no existen patologías cardiacas subyacentes y, según un artículo de la Sociedad Española de Cardiología (2014), se trata un trastorno muy frecuente en nuestra población (8,1%).
Signo de rana (frog sign):
Además del patrón en orejas de conejo, en cardiología existe también el «signo de la rana», que hace referencia a un golpeteo yugular positivo muy similar al movimiento de una rana al croar.
Se trata de uno de los signos de taquicardia por reentrada intranodal y es consecuencia de la contracción cardiaca fuerte por la activación simultánea de aurícula y ventrículo. Aquí un ejemplo muy claro:
Estos ejemplos demuestran una vez más la riqueza del lenguaje médico y ponen de relieve la importancia del uso metafórico del lenguaje para describir signos. Más importante aún, desde el punto de vista de la comunicación con los pacientes, estas metáforas animales pueden mejorar potencialmente la comunicación al utilizar referentes que no son exclusivos a la jerga médica, como los animales.
Esta es la primera entrada en el Blog en http://www.elenaavanzas.com. A partir de hoy, habrá nuevo contenido el primer, segundo y tercer martes de cada mes con distintas temáticas: Traducción médica y lenguaje, Humanidades médicas y Comunicación médica.
Recuerda que para no perderte ninguna entrada puedes subscribirte en la columna de la derecha para que todas las nuevas entradas te lleguen directamente a tu correo electrónico.